En la noche del lunes festivo, y en el Día de la Raza, un grupo de sujetos -que se presume estarían infiltrados en la Universidad del Tolima- le metieron candela a la estructura y también fue rayada con toda clase de grafitis, como el reiterativo "Asesino, genocida".
En las redes sociales este nuevo ataque al rostro de López de Galarza, ubicada en cercanías al viaducto del Sena, ha generado toda clase de comentarios, entre quienes rechazan el hecho y los que creen que debería de una vez por todas retirarse el monumento, blanco frecuente de vandalismo.
“Andrés López de Galarza era un hombre culto. No fue guerrerista. No lideró un exterminio de las comunidades indígenas antes sufrió sus ataques porque el sitio escogido para fundar Ibagué tuvo que ser modificado por el asedio de los indios Pijaos. López de Galarza era un hombre dedicado a las finanzas a quien le encomendaron la misión de fundar un territorio y eso lo cumplió”, dijo el historiador Álvaro Cuartas, en diálogo con Caracol Radio.
Carlos Andrés Portela, secrerario de Gobierno, indicó que están adelantando las investigaciones de rigor para identificar a los responsables de este hecho, que según él es un atentado a un bien público, al cual se le ha hecho una inversión en el pasado para su restauración.
Este suceso hace recordar el que sucedió hace tres semanas en Popayán (Cauca), cuando un grupo de indígenas derribó la estatua en honor a su fundador, Sebastián De Belalcázar, en un hecho que generó una fuerte polémica en las redes sociales.
Carlos Andrés Portela, secrerario de Gobierno, indicó que están adelantando las investigaciones de rigor para identificar a los responsables de este hecho, que según él es un atentado a un bien público, al cual se le ha hecho una inversión en el pasado para su restauración.
Este suceso hace recordar el que sucedió hace tres semanas en Popayán (Cauca), cuando un grupo de indígenas derribó la estatua en honor a su fundador, Sebastián De Belalcázar, en un hecho que generó una fuerte polémica en las redes sociales.